Hay un refrán que dice “para muestra solo vale un botón”.
Si usted visita la web del Ministerio de Electricidad y Energía Renovable de Ecuador verá un apartado que se llama “Proyectos Emblemáticos”.
Hagamos una apuesta. De un total de 9 proyectos renovables, cuántos cree que son de energía solar ?
Teniendo en cuenta de que estamos hablando de un país con uno de los mayores niveles de radiación solar seguramente nuestra respuesta sería 1 o más.
La respuesta correcta es cero.
Del total de 9 proyectos, 8 son hidroeléctricos y 1 es eólico.
Podemos concluir que en Ecuador hay una fuerte dependencia de las lluvias y una falta de diversificación de la matriz energética renovable.
Al estar localizado en la mitad del planeta, el potencial de aprovechamiento de la energía solar en el país es enorme y su uso extensivo ayudaría a alcanzar la independencia energética en el largo plazo.
Dejando de lado el predominio de la hidroeléctrica, Ecuador ha logrado avances en generación eólica en varios sectores del país.
En Loja, el Parque Eólico Villonaco, ubicado a 2.720 m sobre el nivel del mar posee 11 aerogeneradores que generan 16,5 MW.
Las energías renovables se han consolidado en Galápagos, con proyectos avanzados en energía eólica, fotovoltaica y biocombustibles.
En el 2007, tres aerogeneradores se instalaron en la isla San Cristóbal, para dotarla de 2,4 MW. Este parque eólico permite cubrir el 30% de la demanda de electricidad de la isla.
Desde el 2005 también funciona un parque fotovoltaico en Floreana, que cubre el 30% de la energía eléctrica requerida.
Hay un parque eólico en Baltra con una capacidad de 2,1 MW.
En energía solar, la escasa actividad se mantuvo gracias a los acuerdos con el gobierno alemán.
Desde 2004, la Agencia Alemana de Energía lanzó el Programa Cubiertas Solares para promover proyectos piloto de energía renovable en regiones de alta radiación solar.
El Gobierno desarrolló proyectos fotovoltaicos en 8 comunas del Golfo de Guayaquil. El Proyecto Eurosolar dota de electricidad a 91 comunidades aisladas con ayuda de la Unión Europea.
Para el desarrollo de la energía solar se creó una ley que favorecía a los inversionistas, pero lo que faltó fue fijar una garantía económica para esas inversiones.
La regulación actual para energías renovables en Ecuador es todavía bastante pobre.
Es difícil desarrollar grandes proyectos en el país, por lo que debería fomentarse la generación distribuida mediante sistemas fotovoltaicos conectados a la red eléctrica.
Pero ocurre que no hay una regulación para estos sistemas que vierten energía a la red nacional, no se fijan valores para remunerar a las personas que aporten energía y, por el contrario, se cobra también el excedente de energía que se vierte.
El recurso eólico es escaso en la región tropical en la que se sitúa el país ya que no existen vientos importantes y en la noche esos vientos prácticamente no existen.
Ecuador debería aprovechar la energía geotérmica teniendo en cuenta las condiciones geológicas del país, pero desarrollar esta energía implica la realización de estudios muy costosos.
La ubicación de Ecuador es óptima para el aprovechamiento de la energía solar.
Hay otro refrán que dice “Dios le da pan a quien no tiene dientes”.
Negocios y proyectos solares en Latam con Sopelia