Los dispositivos que captan la energía solar térmica van desde colectores colocadas en los techos hasta platos parabólicos o torres solares usadas en las grandes plantas que, concentrando la luz del sol, producen calor y generan electricidad.
Los dispositivos de energía solar térmica se utilizan en países como Haití para:
* Desinfección solar de agua (SODIS)
Mediante luz solar y botellas plásticas PET. La exposición a los rayos UV elimina patógenos y bacterias proporcionando una fuente de agua limpia y reduciendo la transmisión de enfermedades por el agua.
* Pasteurización solar
Mediante una cocina solar e indicadores de pasteurización del agua (WAPIs). La cocina solar calienta el agua y el WAPI (pequeños tubos/cápsulas con cera que se derrite a 65°C, temperatura con la que mueren virus y bacterias) indica cuándo es apta para su consumo ahorrando combustible y reduciendo la transmisión de enfermedades por el agua.
* Secador solar de alimentos
Caja con tapa vidriada y abertura + bastidores de malla. Los alimentos son colocados en los bastidores de malla y se secan a medida que el sol calienta la caja. Reduce uso de combustibles fósiles, la contaminación y las pérdidas postcosecha.
* Cocina solar
Cajas para atrapar el calor, concentradores curvados y panel de cocinas. Un dispositivo (espejo o metal reflectivo) concentra la luz y el calor dentro de una pequeña área de cocción. Reduce la dependencia de combustibles tradicionales como madera o carbón y reduce la contaminación bajo techo.
* Calentador solar de agua
Colector térmico solar + tanque de almacenamiento de agua. El colector calienta el líquido que pasa a través de él y el calor se almacena en el tanque. Reduce la dependencia de combustibles tradicionales; reduce las emisiones de carbono y la contaminación local.
Los constantes terremotos hacen que en Haití muchas personas vivan a la intemperie y en muy malas condiciones.
Como allí dicen, “aquí el sol nunca nos falta”.
Sin embargo, el carbón vegetal es la vida y la lacra de los haitianos. Sin él, no comen.
El 97% del país está deforestado. Cada persona consume al año el equivalente a 500 kilos de madera y una familia media se deja la mitad de sus ganancias en la compra de leña.
La erosión es el gran problema. La gente corta los árboles para poder sobrevivir, no hay otro medio para ganarse la vida.
Este país necesita un permanente compromiso de solidaridad por parte de la comunidad internacional.
Un ejemplo de esto es el proyecto cocinas solares para Mont-Organisé.
Estos dispositivos se basan en la concentración solar: generan energía térmica a partir de la luz del sol que pasa a través de un lente. Energía que se almacena en una «batería» térmica que mantiene el calor durante 20 horas, y por lo tanto permite cocinar también de noche.
Los materiales elegidos para realizar las cocinas son sustentables, biodegradables y el dispositivo, obviamente, no necesita combustible.
El proyecto se desarrolla en colaboración con el Ente Italiano para el Microcrédito, el Departamento Agrario de la Universidad Federico II de Nápoles, Tesla IA SRL y PACNE ONG.
Además de financiamiento, para la expansión de la energía solar hacia los pobres es necesaria una mezcla de mejoras científicas, iniciativas de política y acción colectiva para luchar contra el cambio climático y la falta de acceso a la energía.
Todo lo que necesitas es Sol. Todo lo que necesitas es Sopelia.